
Aunque el ave de la paz se identifique con una paloma, podemos
asegurarle que esto no tiene nada que ver con la paloma que convive en nuestro
entorno.
"Columba livia" a pesar de su buena prensa, es en la actualidad una
auténtica plaga en las ciudades, donde se las considera ratas voladoras
en poblaciones incontroladas.